El día 21 de septiembre por la noche nos reunimos un grupo de 17 religiosas para trabajar y programar la pastoral juvenil y vocacional de los colegios concepcionistas de la Provincia de España para el curso 2018-19.
En un ambiente fraterno y de gozo compartimos la cena y a continuación recogimos el día. Se nos invitó a descansar nuestro día y el inicio de curso en la mirada de Dios: para mirarlo con su mirada, con mirada de pobre que todo lo espera de Él, para mirarlo desde dentro, para mirarle a Él siempre presente en cada acontecimiento y para mirarlo-nos con misericordia.

El 22 sábado iniciamos el día compartiendo Laudes.De fondo la brisa del Espíritu, luz, consuelo, fortaleza, ternura, cariño, creador, descanso, sanación… un eco de la Palabra “Venid conmigo a un lugar tranquilo” y la presencia de María. Después del desayuno la Palabra que iba a iluminar nuestro trabajo: La Parábola del Sembrador. En la capilla en un ambiente de oración, fraternidad, acogimos las semillas que el sembrador iba depositando en cada una para sembrarla en la tierra de nuestra congregación. María a lo largo de la mañana se fue encargando de hacer florecer nuestro jardín. Ya en la sala de trabajo leímos el orden del día y comenzamos manos a la obra.

Lo primero fue dar respuesta a la pregunta ¿De dónde venimos? Después de estos 3 años (capítulo provincial) - 6 años (capítulo general). Hicimos un repaso de encuentros, objetivos marcados, actividades programadas etc… durante este periodo de tiempo en pastoral juvenil y vocacional. A continuación, M Belén nos presentó desde la pregunta ¿Hacia dónde vamos? Las prioridades que han surgido en el capítulo general para abordar la prioridad de prioridades:

LA PASTORAL VOCACIONAL

Una vez presentadas las prioridades nos lanzaba los siguientes interrogantes:
1.- ¿Cómo me encuentro a nivel vocacional? ¿Qué nutre mi vocación y qué la debilita?
2.- ¿Cómo puedo yo favorecer en la comunidad religiosa y educativa la pastoral vocacional?
3.- ¿Cómo hacer realmente prioritaria la pastoral vocacional en la provincia?

Para iluminar la respuesta a las preguntas estuvimos leyendo de forma individual un documento del Papa Francisco: “los sacerdotes y consagrados son los primeros animadores vocacionales”. Después de la lectura y reflexión respondimos a las preguntas de forma individual y después nos reunimos por grupos para compartir las respuestas. Después de un breve descanso regresamos a la sala de trabajo para compartir las respuestas y propuestas que habían surgido en el compartir de los grupos. Surgieron propuestas para ir caminando a lo largo del trienio en clave vocacional. Por la tarde retomamos el trabajo después de la comida. Bien pronto para aprovechar el tiempo. El punto que teníamos sobre la mesa era la organización de la SEMANA VOCACIONAL. Cuadramos fechas, planificamos actividades y ...destapamos el bote de los sueños de Santa Carmen Sallés.

Elegimos un LEMA: Llama.2 y nos coordinamos por grupos de animación

Grupo 1: Rosario Moreno, Carmen Cristobal, María Saiz, Isabel Martínez, Mercedes Romero
Grupo 2: Cristina Mazariegos, Mª Jesús Mora, Rebeca Sosa, Ana Isabel Trujillo, Andrea Bordas.
Grupo 3: Ana Rosa Gordo, Pilar Antoñanzas, Nieves Galey, Victoria Blanco, Ana Lago.

Por la tarde compartimos la Eucaristía, celebrada por el P Víctor, agustino responsable en su congregación de la pastoral vocacional que nos alentó a sembrar y nos animó a vivir transmitiendo a los jóvenes que merece la pena seguir a Jesús. Después de cenar salimos a dar un paseo. El Domingo 23 nos unimos a la comunidad de San Lorenzo de el Escorial para la celebración de la Eucaristía y después de desayunar nos reunimos en la sala para terminar la última sesión de trabajo.

Revisamos el cronograma de actividades para este curso y M Cristina presentó un boceto del Congreso de Alumnos Concepcionistas que tendrá lugar del 24 al 26 de enero: lugar, participantes, religiosas y laicos que acompañarán, inscripción para el congreso, tema y lema (“En clave concepcionista”). El encuentro concluyó a las 13´00 aproximadamente. Todas agradecemos la cariñosa y excelente acogida de la Comunidad de San Lorenzo de El Escorial.